Día frío y gris. Acurrucado entre kilos y kilos de mantas (siempre he tenido la certidumbre de que lo que calienta es el peso) busco alguna excusa que me ayude a eludir la obligación de salir de mi cama, pero me da que no va a ser posible. Solo queda, como último recurso, la pura y simple cabezonería.
Hoy no voy a salir de casa: batín y café caliente, un buen libro y jazz.
No, no voy a salir, me digo mientras me meto en la ducha. Olvidaré todos y cada uno de mis compromisos y clases, cada suceso importante para dedicarme al ancestral arte de no hacer absolutamente nada. A oir pasar los coches, ese mar mecánico, como cuando trato de dormir en las asfixiantes noches de agosto. Definitivamente no. Hoy me quedo aquí.
¿Qué sentido tiene hacer cosas hoy? Hoy es un día para mi, farfullo mientras me voy vistiendo lentamente. Me quedaré en casa y haré lo que me gusta. Quizás toque un rato el saxo, o podría ponerme alguna de esas películas que quiero ver y nunca encuentro cuando. Podría sentarme y escribir cualquier cosa en mi blog. Hay tantas cosas que hacer en casa.
Entonces, decidido. Lo mejor es que me quede. He llegado a esta conclusión entre tostada y tostada, y me parece la más sensata. Me enorgullezco de ser una persona tan racional, me digo a mi mismo. Me planteo problemas, los razono y llego a conclusiones lógicas. Ojala todos fueran como yo. El mundo sería de otra manera. Así que, para ser coherente conmigo mismo, hoy no salgo de casa.
Hoy me quedo, le digo al espejo mientras termino de arreglarme un poco el pelo, y cojo las llaves de casa, cerrando la puerta de golpe detrás de mi.
4 comentarios:
Como creo que me va a volver a poner como anónima (seguramente será por haberme cargado a tus fuentes con mi Katana), me autopongo yo, jeje: BRAIDA.
Tu plan me parece excelente y desde un punto de vista totalmente racional como el que has planteado, creo que me has convencido: yo también me quedaré en casa, acurrucada en el sofá con mi manta de colores, leyendo tranquilamente un libro, con una taza de chocolate en las manos (sustituyendo al café) y escuchando un cd relajante de sonidos de la naturaleza (a falta de cds de jazz que seguramente me prestarás, jejeje).... exacto, eso es lo que voy a hacer (pienso y me digo a mí misma tecleando estas palabras en el blog, mientras termino de desarrollar un divertido proyecto de patrimonio histórico y tecleo el número de la Generalitat en el teléfono para iniciar una interesante conversación de negocios....).
Y me pregunto a mí misma: ¿y cuándo dejé de ser una niña?. Cuando aprendí que lo que quería y lo que debía no siempre eran lo mismo ;-) , como muy bien expresas en tu post (genial por cierto, jijiji) ..... y me digo: noooooo!!!!, cuando aprendí que lo que no quería y debía.... ya que deber debía.... y ya que el tiempo lo aplicaba igual con el deber (debiendo aun no queriendo).... y ese tiempo aún era mi tiempo..... mejor aplicarlo de manera útil y tratando de disfrutarlo lo máximo posible (aún no queriendo y debiendo, jejeje), que de manera inútil esperando a que cada interminable segundo se agote del reloj universal (por no querer y deber).
Yaaaaa, ya sé que mi cerebro no anda bien por ahí arriba, pero qué le vamos a hacer; si yo he asumido mi incapacidad neuronal... ¿por qué no han de asumirla los demás?, jajajajaja.
Muchos besos... y un post precioso: disfruta de tu café, relájate en tu sillón-sofá-butaca-silla, escucha tu cd de jazz y aprovecha cada segundo de tu vida (escogido o ¿impuesto?, pero tuyo). Que yo haré lo mismo, jajajaja.
B O R I N O T !!!
P.D.: Cinema Paradiso als llavis de Dulce Pontes.
P.D.: Tu ja m'entens.
Gracias Braida/anónima por tu respuesta. Yo sí que te he entendido, y coincido plenamente contigo. Por mi parte, he decidido a partir de ahora no volver a salir a la calle ningún día lluvioso. ;)
I joan, no, no t'he entés. Tindré que esperar a fer-me major :).
Olé!!
Mencantó este post. Es la idea genial para un corto...
Tu tienes alma de artista Mario!!...Porfavor!! Tienes que hacer algo con todo esto!
Ya sólo vivir la vida así me parece precioso. El hecho de compartirlo con nosotros es todo un regalo.
Comparte y disfruta tu vida...y no mires atrás!
Besos calmos y relajantes...
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